Cuaaando llegaron los españoles...
Parece chiste, pero es anécdota...
Sin querer llegar a ser el aburrido libro de historia que nunca abriste en la media, queremos poder contarte como Chile a sido un país cañamero incluso antes de su independencia y porque está en nuestras raíces y tierra ser un país cultivador de alto impacto como lo está siendo hoy, en un contexto aún sin regular e ilegal en muchos veredictos de la corte.
Con la llegada de los españoles a nuestras (ahora) tierras, se trajeron consigo, además de una variedad enorme de árboles frutales y animales, semillas de cáñamo para ser cultivado en estas tierras y así aprovechar sus beneficios textiles. Si bien a Diego de Almagro se le responsabiliza la llegada de las primeras semillas para cultivo en conjunto a otras especies al territorio valdiviano, no fue si no hasta el mando de Pedro de Valdivia (1541) que se formaliza la que ahora se conoce como "trans culturización botánica" por la adaptación de frutos y vegetales españoles en tierras 'sudaca' y viceversa, estableciendo el cáñamo en territorio chileno.
Aunque la prohibición de la venta de cáñamo fue con la Ley N 17.934 establecida por el gobierno de Allende y modificada con la Ley N 18.403 por la dictadura de Pinochet; en un principio, desde el periodo de conquista hasta después de la independencia, Chile fue uno de los países con mayor importancia en el cultivo de la planta a causa de sus abundantes cosechas gracias a su clima y territorio idóneo para el cultivo y siembra de cáñamo, llegando a ser uno de los productos básicos de exportación para la colonia chilena.
"... Que hagan sembrar y beneficiar en las Indias lino y cáñamo, y procuren que los indios se apliquen a esta granjería y entiendan en hilar y tejer lino..."
Indias se le llamaba a lo que hoy conocemos como américa por confusión geográfica de la época de descubrimiento
Tanto era el éxito en la producción y manufactura del cáñamo que el rey Carlos V (hijo del conocido rey 'Felipe el hermoso' y 'Juana la loca') en 1545 decretó a los virreyes y gobernadores de la colonia que los indios fueran empleados para el cultivo de cáñamo, comenzando a tener registros de su producción en la época sobre nuestros territorios.
Juan Bautista Pastene, navegante genovés perteneciente al reinado español y lugarteniente de Pedro de Valdivia en 1550, a cambio de indios esclavos y un pedazo de tierra que entregó (hoy conocido como Curacaví), pudo cosechar y manufacturar cáñamo en sus plantaciones, creando una fábrica de frazadas para la colonia y jarcias para los barcos.
Un desarrollo constante que nos dejo la Edad Media hasta hoy fue la necesidad de mejorar las embarcaciones, adecuándolas para soportar altas cargas de mercadería, insumos e incluso esclavos provenientes de Brasil. Por esto se buscaba poder mantener los bajos costos de transporte, lo que llevo a que que para fines del siglo XV el uso de cáñamo para la creación de barcos y sus respectivas provisiones, fuera un común denominador para un sin fin de países exportadores, aumentando la demanda de la planta por todo el territorio Europeo y lo que hoy conocemos como América.
Para 'La guerra de los treinta años', el conflicto entre Rusia y España volvía peligrosa la transacción de cáñamo y sus insumos fabricados con su fibra (resistente y aislante), lo que volvió a Chile como un exportador potencial para la demanda que requería en ese tiempo Perú y el sur del pacífico, convirtiéndose así en el producto básico para la colonia.
En ningún otro territorio de conquista español podía producirse un cáñamo de calidad y rentable como lo era en Chile (Quillota y la Ligua pudieron tener las primeras cosechas aceptables -¿los nortinos siempre estuvieron presentes?-), es por ello que se convierte en la única y central opción de abastecimiento de fibra para los conquistadores españoles. Se estima que la cosecha anual para el siglo XVII era de aproximadamente 8000 quintales (1 quintal = 75kg aprox) lo que llevó a pensar que Chile podría ser incluso exportador de España y Europa, pero el costo de transporte y seguridad era tan elevado que la idea se desistió, concluyendo con España potenciando su producción y manufactura parar exportar dentro de Europa mientras el Chile colonial exportaría al territorio peruano y el Pacífico Sur.
Mientras tanto en las costas de Valdivia, se comenzó a tener cultivos estratégicos de cáñamo para las jarcias, sogas y demás suministros para las tripulaciones y embarcaciones en el mar, no dependiendo de exportaciones, teniendo una ventaja en sus enfrentamientos al estar preparados ante posibles ataques por la costa de enemigos.
A finales del siglo XVIII (1735) altos rangos de la nobleza eran los mayores fabricante de cáñamo en Chile, pero con productos de una pésima calidad por un mal trabajo de manufactura.
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Después de la independencia de Chile (1822), Bernardo O'higgins firmó el decreto "Contrato de cáñamo propuesto y aceptado por el gobierno", fomentando su cultivo y beneficios, con el fin de enfrentar el empobrecimiento que presentaba el país, disminuyendo impuestos a quienes lo cosecharan, dando empleos y aumentando las fuentes fiscales.
Bibliografía Cultivos importantes para la corona Española Prohibición del cannabis en Chile Zonas de cultivo en Chile
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